Comité de Resistencia Popular de Pinto

Desde hace ya un tiempo se venía buscando en nuestra localidad una mayor unidad y organización política, que fuese capaz de unir a trabajadores, desempleados, estudiantes y todo tipo de personas concienciadas, por esto, el primer objetivo del C.R.P. es dotar de una organización y de un proyecto político comunes a personas de diferentes ideas e ideologías pero que comparten un mismo carácter revolucionario y combativo. Otro objetivo es el que su propio nombre indica: capacitar a los trabajadores y estudiantes para encontrar una resistencia al momento político y económico que sufrimos actualmente, pues sólo organizándonos seremos capaces de resistir, y tan sólo resistiendo se podrá buscar la consecución de los objetivos marcados.

La creación de un C.R.P. es algo que creemos indispensable para la organización de la clase trabajadora, pues capacita su ordenación en función de los barrios o municipios a los que pertenece, promoviendo a la vez la unidad entre todos ellos, lo cual es hasta el momento inexistente.

Por otro lado, al tener una línea política y unos objetivos claros, no comulgamos con ideologías neoliberales, xenófobas, machistas, racistas o sexistas. Así como con políticos o sindicalistas de “izquierdas” que sólo vean una oportunidad de captar apoyo para sus organizaciones corrompidas y/o vendidas al sistema. Ni los causantes de los problemas, ni las personas que los apoyan, podrán nunca formar parte de la solución.

 

Este nuevo C.R.P. se une así a otro ya existente, y esperamos y deseamos que sea uno más de una larga lista. Otros momentos de la historia han demostrado que éste tipo de organizaciones del pueblo son necesarias y eficaces; esto no es algo nuevo, simplemente vuelve a ser el medio que tenemos los trabajadores, estudiantes, parados y demás agentes de la clase obrera para organizarnos frente a un sistema económico que nos asfixia y nos vacía de derechos, pues no podemos seguir poniendo la otra mejilla cuando somos apaleados impunemente en las calles, o perdemos derechos sociales ganados con sangre por generaciones pasadas.

 

Ha llegado de nuevo el momento de organizarse de una forma seria y consciente, sin mendigar reformas, y sin avergonzarnos de nuestra clase social.

 

¡Por todos los que lucharon! ¡Por todos los que luchamos! ¡Y por las generaciones futuras!

 

¡El único camino fue, es y será una organización popular de clase y combativa!

 

 

 

 

*Por C.R.P.Pinto

 

 

Contra su represión, nuestra resistencia.

   La represión es un arma de los Estados  contra su propio pueblo. El propio Estado es una institución creada como arma de opresión y control de una clase sobre otra. La función de la represión es mantener al pueblo sumiso, aturdido, inmóvil de miedo, alienado ante las represalias.

    La represión se ha dado históricamente en todo tipo de modos de producción y en todo tipo de Estados (feudalismo, capitalismo, democracias burguesas, Estados fascistas…) aunque en algunos  países y tipos sea más descarada y cruel que en otros.

    En el nuestro, ésta, se ha producido se forma sistemática desde tiempos inmemoriales (inquisición, monarquías absolutas…) hasta el día de hoy, en este Estado heredero del franquismo. No vamos a enumerar ni hacer un “catálogo del horror” de los actos represivos, vejaciones, torturas, asesinatos que hemos sufrido el pueblo (aunque sea desde el año 36 hasta hoy), tanto en su etapa de dictadura fascista abierta, como tras la “transacción” en la época de fascismo camuflado bajo una democracia parlamentaria, dictadura del capital en ambos casos. Este es el país del GAL, el país de las torturas (denunciado hasta por “Amnesia internacional” o el Tribunal de Estrasburgo), el país de los grises (o los azules) matando a palos en la calle, el país de las bandas de matones ultraderechistas asesinando impunemente, etc.

    Pero sí queremos, tras esta breve introducción, nombrar y solidarizarnos con algunos de los últimos casos dados, y así con ello, hacerlo con la totalidad, siendo uno de los más cercanos el de l@s reprimid@s en y tras las manifestaciones del 25S/29S (entre tantas otras). La policía dejó una cantidad importante de herid@s apaleando indiscriminadamente y con total impunidad (como se ha visto en los cientos de imágenes), a gente sentada, a personas mayores, entrando a bares y sacando a hostias a los clientes…, creando además con ayuda de sus medios de alienación y comunicación esa división entre “violentos y pacíficos”, “los de la cara tapada y los de las flores”, para crear una falsa opinión pública y poder descargar más fácilmente la represión más dura contra quienes ofrecen una resistencia activa a su régimen de opresión y explotación.

    Otro caso es el de el sindicalista gallego  Xesús López Pintos, responsable comarcal de la CIG en El Ferrol, que fue vejado, golpeado y torturado tanto en su detención como en su paso posterior por comisaría.

    También lo es el de la ciudadana vasca Enara Rodríguez, hermana del preso político Arkaitz Rodríguez (caso Bateragune) que a su vuelta en coche tras una visita fue perseguida, sacada de la carretera con varios trompos, después insultada, vejada, golpeada, sufrió tocamientos y amenazas de violación por parte de dos policías identificados con sus placas.

    Mencionar también el del productor de música rap (y estrecho colaborador del también represaliado Pablo Hasél), Marc “hijo de Sam”, que fue detenido en su domicilio en un gran despliegue policial de Mossos d'Esquadra por orden del Tribunal de Orden Público (hoy Audiencia Nacional), bajo acusaciones de pertenencia a banda armada  y que luego fue puesto en libertad bajo fianza de 500 €  (sí, extraño terrorista que atenta con letras de canciones y que sale bajo fianza de 500 €…), en fin, otro montaje represivo más para intentar acallar las voces críticas.

    Como hemos dicho no es cuestión de enumerar todas y cada una de los atropellos e injusticias sufridas por la clase trabajadora a manos del “Estado de represión”. Nuestra intención es hacer públicas algunas de las ultimas y solidarizarnos con todas y cada una de las demás.

    Pero sobre todo hacer un llamamiento a la resistencia, a no dejarnos pisar, a decir basta ya de montajes, de torturas, de abusos, de detenciones y encarcelamientos políticos, de represión jurídico-político-policial. Sus porras, leyes y amenazas no solo no nos van a callar, sino que nos van a hacer gritar más alto. Cada golpe recibido reforzará nuestras espaldas, ya duras de por sí de las largas jornadas de trabajo impuestas por el capitalismo. Podrán partirnos en dos, pero jamás doblegarnos.

¡¡Solidaridad con tod@s l@s represaliad@s, golpead@s, detenid@s, pres@s…!!
¡¡Basta ya de represión, de terrorismo de Estado y de abusos de poder!!
¡¡No nos callarán!!  ¡¡No pasarán!! ¡¡Resistencia Popular!!

*Por C.R.P. Villaverde